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Ensangrentada y esposada salió de la zona de seguridad una adolescente que regresaba casa luego de recibir un tratamiento por un tumor en el cerebro en el hospital St. Jude, de acuerdo con el sitio The Free Thought Project.
Hanna Cohen de 19 años de edad regresaba junto con su madre, cuando sufrió la terrible experiencia en la zona de seguridad del aeropuerto de Memphis, en donde al ser inspeccionada, sonó un detector de metales y fue separada para una segunda inspección.
La chica que además es parcialmente sorda, se sintió confundida de acuerdo con su madre Shirley Cohen, por lo que ella intentó explicarles a los agentes que Hanna acababa de salir de cirugía, es parcialmente sorda, ciega de un ojo y que se confunde con facilidad, lo que no evitó que los agentes la separan de la fila para una segunda inspección.
Al no comprender que ocurría, la chica intentó correr, por lo que fue violentamente sometida, provocando que se golpeara la cabeza en el piso, a unos cuantos días de haber pasado por la cirugía mediante la cual le extirparon el tumor del cerebro.
Así se la llevaron detenida junto con su madre y tuvieron que pasar la noche encerradas, de acuerdo a Shirley Cohen.
Y aunque los cargos fueron retirados en contra de la chica, la madre está demandando por 100 mil dólares al aeropuerto de Memphis, a los agentes de la TSA y a la policía.
Las autoridades del aeropuerto dijeron que las personas que viajan con pacientes con necesidades especiales pueden llamar por adelantado y notificar a la TSA en los aeropuertos.
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