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Cenar temprano puede hacer la diferencia entre padecer algunos tipos de cáncer o estar completamente sano.

De acuerdo con un estudio publicado en el sugiere que dejar un intervalo de dos horas entre la hora de cenar y la de dormir reduce un 20% el  riesgo de padecer cáncer de mama y próstata.

Los investigadores analizaron los datos de 621 participantes con cáncer de próstata y mil 205 con cáncer de mama, así como también 872 hombres y mil 321 mujeres que trabajan en el turno nocturno.

Los voluntarios fueron entrevistados sobre sus hábitos alimenticios, de sueño, horario de comida y el cumplimiento de las recomendaciones para la prevención del cáncer.

La mayoría de las personas dijeron desayunar, comer y cenar, alrededor de un tercio dijo que tomaba un tentempié en la tarde, mientras que el 7% comía un refrigerio después de la cena.

No obstante, especialistas del estudio sugieren más investigación al respecto para cubrir más posibles factores que ponen en riesgo a la salud.

En la galería te dejamos con otros riesgos de cenar antes de ir a dormir.

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