El Gobernador de Colorado, Jared Polis, encabezó una ceremonia para conmemorar la emisión de 250,000 licencias de conducir para los inmigrantes en el estado, desde la aprobación de la ley SB13-251 (que les permitía obtener este tipo de documentos) hace diez años.

En el evento, Polis anunció que se ampliará el número de oficinas estatales donde los extranjeros indocumentados pueden solicitar un permiso de conducir. Hasta el momento, solo 11 de ellas ofrecían este servicio. 

La ley fue firmada por el gobernador en 2012, pero comenzó a ponerse en marcha un año después, debido a restricciones presupuestarias impuestas por el Partido Republicano.

Durante varios años, solo cuatro oficinas estuvieron habilitadas para emitir licencias para indocumentados, siendo esta cifra elevada a 11 en 2019, cuando los Demócratas controlaron el Legislativo.

Actualmente, todas las oficinas de DMV están disponibles para los "residentes indocumentados".

El Senador Federal, John Hickenlooper, quien era el gobernador en funciones cuando la ley fue aprobada, envió declaraciones en las que afirmaba que la normativa permitió que "los nuevos habitantes de Colorado, como estudiantes internacionales e inmigrantes, lleven a sus familias al trabajo, a la escuela, a las citas médicas y al supermercado".

Según el Instituto Fiscal de Colorado (CFI, una organización sin fines de lucro no gubernamental), desde la aprobación de la ley SB13-251, unos 170,000 vehículos que antes circulaban sin seguro ahora lo tienen. Por eso, durante la última década, los automovilistas de Colorado pagaron 127 millones de dólares menos en seguros que lo que hubiesen pagado sin la ley.

Y las compañías de seguros ganaron 360 millones de dólares adicionales. Además, el costo de emitir las licencias para residentes indocumentados se cubre con los aranceles que los inmigrantes pagan por ese trámite.

Nancy Díaz, fundadora en 2015 de Lamar Unidos, un grupo proinmigrante en el sureste de Colorado, declaró que se encuentra muy contenta y que al mismo tiempo, el "trabajo de la coalición continúa" ya que "ahora buscamos mejorar el programa de licencias y garantizar la equidad para todos los beneficiarios”.

La ley permite que todos los habitantes del estado, incluidos los inmigrantes indocumentados que han vivido en el estado durante al menos dos años y han pagado impuestos, puedan obtener una licencia de conducir. A los inmigrantes que cumplen con estos requisitos se les emite una licencia especial que no puede usarse para fines de federalización.

Con la implementación de la ley, los inmigrantes pueden obtener el seguro de automóvil y seguro médico básico.

El Gobernador Polis afirmó que la ley, la cual recibió apoyo bipartidista, hace que Colorado sea más seguro en las carreteras y ayuda a reducir las tarifas de seguros de automóviles para todos. Aseguró que con esta implementación, los indocumentados que sean elegibles (no tener antecedentes criminales, haber vivido y pagado impuestos en Colorado) podrán gestionar sus licencias de conducir en cualquiera de las 36 oficinas del DMV del estado.

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