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Los consumidores estadounidenses han descubierto con entusiasmo las lámparas que simulan y asemejan la luz del sol.
Por inclinación natural el cerebro humano segrega diferentes substancias según las necesidades que se le presenten, por ejemplo para irse a dormir a la hora que le toca al cuerpo descansar, segrega melatonina y el aviso que da la orden para producir tal es el día que se desvanece y la noche que cae con su obscuridad.
En sentido similar el cerebro al percibir los primeros rayos del sol comienza a segregar serotonina naturalmente y ese es el efecto que pretenden dar las lámparas conocidas como de luz solar.
No hay que confundirlas con los paneles solares que se recargan con la luz del sol.
Las lámparas cuentan con unas 40 tonalidades diferentes, que van desde tenue hasta brillante y comienzan a proyectar las tonalidades de menor intensidad entre unos 40 a 20 minutos antes de que se programe el despertador, a la hora que se programa para despertar alcanzará su máximo esplendor.
Todo el beneficio de la naturaleza pero sin los rayos dañinos ultravioleta.
Los fabricantes aseguran que estudios científicos independientes han comprobado que se despertará de buen humor y con energía.
Para más beneficios de la luz solar mira la galería, con información de Livestrong.
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