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CIUDAD DE MÉXICO, abril 17 (EL UNIVERSAL).- Las rodillas, el hombro, la cabeza, el cuello, las costillas, tal parece que no hay una zona del cuerpo que la haya librado en el andar de Niebla Roja en los cuadriláteros profesionales.
Así que con el orgullo intacto busca una revancha para alcanzar el sitio de estrella con el que siempre ha soñado.
“Es parte del ser luchador, la verdad es que no sé por qué sigo en la lucha libre. Tengo algo de masoquista, aunque en algún momento si llegué a pensar en el retiro, pero aquí sigo, en la mejor empresa y con la oportunidad de brillar”, aseguró el enmascarado.
Han sido tropiezos que detuvieron su avance en el Consejo Mundial de Lucha Libre pero motivos tiene muchos para resurgir: el campeonato y la máscara de Dragon Lee, son los objetivos inmediatos en su carrera: “Él es un luchador que ha crecido mucho en poco tiempo, ha ganado máscaras importantes pero yo sé que puedo enfrentarlo en luchas importantes. Lo supero en experiencia, he pasado más cosas como luchador y las he superado, en general me siento fuerte para cualquier reto”, afirmó.
Surgido del inagotable semillero de la Comarca Lagunera, Niebla forma parte desde hace algunos años de Los Guerreros, agrupación ruda por excelencia que suele proyectar a sus integrantes a sitios estelares. “Es un orgullo y un compromiso ser parte de esta agrupación. El Último Guerrero me dio la confianza y siento que no lo he defraudado, desde que porto este equipo soy un luchador diferente, no me arrepiento de mi pasado pero como rudo todo ha cambiado, me siento más libre”, sentencia el enmascarado.
Así que las rencillas que ha tenido en últimas fechas con algunos de sus compinches de agrupación, le duelen igual que las peores lesiones sufridas.
