Un emprendedor experto en tecnología piensa que puede recobrar lo esencial del colegio al quitar conferencias, edificios cubiertos de enredaderas, el fútbol americano, la residencia y las librerías
A esta nueva tendencia le llaman el proyecto Minerva y las instalaciones que lo albergan se encuentran en la ciudad de San Francisco. El creador, el CEO de 39 años Ben Nelson, su objetivo, reformar el colegio de artes liberales modernas.
Minerva es una Universidad acreditada con oficinas admirativas y dormitorios en San Francisco y planea abrir instituciones académicas en por lo menos seis ciudades más alrededor del mundo.
Lo que hace a Minerva diferente es su programa de computación, una plataforma en línea creada y desarrollada por uno de sus miembros desde el 2012, Stephen M. Kosslyn uno de los psicólogos más reconocidos de Harvard, quien también fue decano.
Minerva ofreció su primera clase este año para 33 estudiantes, a quienes les dio una beca por 10 mil dólares anuales, hospedaje gratis el primer año. Se espera que el próximo año las clases cuenten de 200 a 300 estudiantes.
La colegiatura anual será de unos 28 mil dólares incluido el hospedaje y resulta unos 30 mil dólares más barato que la mayoría de los colegios.
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