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La mansión que adquirieron en 2013 Kim Kardashian y el rapero Kanye West en el exclusivo barrio de Bel-Air, Los Ángeles, California, fue vendida por la exorbitante cantidad de 17 millones de dólares, precio con el que pasó a ser a casa vendida más cara de la historia del lugar.
De acuerdo con la revista People, el lujoso inmueble fue adquirido por Marina Acton, una empresaria exitosa de Silicon Valley.
El precio total de compra fue de 17.8 millones de dólares por un área de 836 metros cuadrados (9,000 pies cuadrados); la ex residencia Kardashian-West cuenta con seis dormitorios, ocho baños y piscina y fue remodelada por la pareja para convertirla a un estilo minimalista.
Sin duda, el negocio fue redituable para los hoy ex propietarios, pues cuando adquirieron la propiedad ésta tuvo un costo de 9 millones de dólares, por lo que ahora se estarían echando a la bolsa alrededor de 8 millones extra.
La residencia fue vendida a través de la agencia de bienes raíces The Altman Brothers, cuyos propietarios los hermanos Josh y Matt se dedican a la venta de las más lujosas residencias de Beverly Hills, Bel-Air y Holmby Hills en Los Ángeles.
