Este año, los roles de Jesús y María son llevados por Gabriel Alvarado y Anabel Ángel Gutiérrez, dirigidos por Luis Hernández, así como los miembros del comité Manuel Olmos y Saúl Ordaz.
“En la representación participan más de 20 personas, esto es en la Gustavo A. Madero, donde llegan cerca de 5 mil personas”, comentó Luis Hernández.
Es una tradición que ha pasado de generación en generación, de padre a hijo y nietos”, agregó el dirigente.
Para Gabriel, el representar a Jesús de Nazaret requiere de una triple preparación: “Una es la física, en la que uno va al gimnasio y entrena duro, pero las más importantes son la espiritual y la emocional, por lo que a uno se le dan pláticas especiales y acude a retiros religiosos”.
A decir de Anabel, el participar en esta tradición la llena de fe y esperanza: “Es mi primera vez como María, queremos que sea algo muy emotivo”.
Este fin de semana se realizan las principales actividades de la Pasión de Cristo.
