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Hay múltiples maneras de obtener una Green Card para vivir y trabajar en Estados Unidos de manera legal. Una de ellas es hacerlo mediante el empleo.
Son elegibles para obtener la residencia permanente los solicitantes que tienen una oferta de trabajo en Estados Unidos, pero dan prioridad a ciertos perfiles.
“Varias categorías de visa de inmigrante se basan en el empleo. Su educación, habilidades y experiencia laboral son algunos de los factores que se utilizan para determinar si la persona es elegible para un tipo específico de visa”, anotan los Servicios de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS).
Quienes tienen más posibilidad de obtener una visa a través del empleo son:
Primera preferencia (visa EB-1) Trabajadores prioritarios
Extranjeros con habilidades extraordinarias en las ciencias, las artes, la educación, los negocios o el atletismo; destacados profesores e investigadores; o ciertos gerentes y ejecutivos multinacionales.
Segunda preferencia (EB-2) Extranjeros con habilidad excepcional
Se da esta visa a quienes tienen títulos avanzados o habilidades “excepcionales” que actualmente no se cubren en el mercado estadounidense.
Tercera preferencia (EB-3) – Trabajadores calificados
Abarca aquellos trabajos de los cuales hay escasez en Estados Unidos y necesitan contratar extranjeros calificados para cubrir las labores. El empleador tiene que presentar una certificación laboral del Departamento de Trabajo (DOL) y luego presentar el Formulario I-140, Petición de Inmigrante para Trabajadores Extranjeros, en su nombre.
“Para las ocupaciones en las que el DOL ya ha determinado que hay escasez, no necesita una certificación laboral”, anotan.
El número de visas basadas en el empleo que se otorgan están limitadas a 140,000 por el Departamento de Estado.
¿Cómo presentar la solicitud de Green Card?
El primer paso es que el empleador presente una certificación laboral o solicitud (ETA-750) al Departamento de trabajo. Esta es una prueba en el mercado laboral nacional. Determinan si un estadounidense o alguien que ya es residente puede hacer el trabajo. Si no es así, se procede a la autorización del extranjero.
Como segundo paso, el empleador presenta ante USCIS el Formulario I-140, Petición de Trabajador Inmigrante Extranjero. Es muy importante contar con un empleador que tome el papel de patrocinador financiero. Así se garantiza que el trabajador tendrá un salario para poder subsistir en Estados Unidos, con el que no requerirá de ayuda gubernamental.
En el tercer paso, quienes viven en Estados Unidos y tienen una visa EB-1, EB-2, o EB-3 pueden presentar el Formulario I-485 ante USCIS; es la Solicitud de Registro de Residencia Permanente o Ajuste de Estatus para solicitar una Tarjeta Verde sin salir del país. En este paso se toman los datos biométricos.
Las autoridades migratorias tomarán una decisión final sobre la solicitud. Darán preferencia a quienes pasen el filtro de inspección de antecedentes y tengan la autorización de un empleador para trabajar en el país.
Toma en cuenta que no te darán la Green Card si en el pasado cometiste una violación a la Ley de Inmigración o estás acusado de un delito grave.
Te negarán la Tarjeta Verde si descubren que mentiste en los datos de tu solicitud, si usurpas una identidad o proporcionas información falsa. También si cometiste un fraude que involucre beneficios migratorios.
Con la Green Card, las personas pueden vivir y trabajar legalmente. Además, es un requisito previo para obtener la ciudadanía estadounidense.
