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<span ><strong>Paris Hilton</strong></span> cuenta con una fortuna millonaria y muchas propiedades de lujo que consiguió sin mucho esfuerzo, no obstante, su familia, decidió que es momento que la socialité consiga logros por su propio esfuerzo, pues sus padres han decidido que no le heredarán su fortuna por una razón en específico.

La celebridad estadounidense ya no podrá acrecentar su colección de Bentleys de color rosa, ya no podrá realizar sus viajes excéntricos y ya no se dará una vida de reina; o tal ves sí, pero no con el dinero de sus padres, sino con los 100 millones de dólares que tiene en el banco.

De acuerdo con , su padre, Barron Hilton tiene planeado dejar el 97 por ciento de su patrimonio a la Conrad N. Hilton Foundation cuando fallezca, dejando solo el 3 por ciento del restante a sus numerosos herederos.

Sin embargo, según el medio, la idea original de hace uno años era que el millonario estaba dispuesto a dejar toda su fortuna de 4.5 mil millones de dólares a su familia, pero cambió de parecer en 2007, después de sentirse avergonzado por los muchos escándalos que protagonizó Paris, además de su derroche excesivo.

Con dicha decisión, las labores de la fundación Conrad N. Hilton, el abuelo de<span > Paris </span>que construyó el imperio de hoteles de la nada, duplicará sus labores altruistas. De esa forma, los hermanos y medios hermanos de la celebridad podrán agradecerle el 'favor' que les hizo.

Conrad Hilton compró su primer hotel en Texas en 1919 después de que fracasara en un intento de adquirir un banco. El boom petrolero en el estado ayudó a que las habitaciones se mantuvieran ocupadas en todo momento, lo que fue genial para el negocio hotelero.

En 1925, construyó el rascacielos Dallas Hilton y luego edificó tres hoteles Hilton más en un período de cinco años. Durante la Gran Depresión Conrad perdió varios de sus hoteles y casi se declaró en quiebra. Sin embargo, tras dicho tropiezo, creó la primera cadena hotelera internacional del mundo. En 1966, su segundo hijo, Barron, padre de Paris, lo reemplazó como presidente.

En 1979, a la edad de 91 años, Conrad Hilton murió por causas naturales, dejando 10 mil a cada uno de sus sobrinos, sobrinas y su hija; y 500 mil para sus dos hermanos. El resto de la herencia fue legado a la Conrad N. Hilton Foundation, que había fundado en 1944.

Sin embargo, Barron impugnó la voluntad de su padre después de que éste muriera, pese a que se le dejó como presidente de la corporación. Gracias a ello, Barron se quedó con 4 millones de acciones de la empresa, la Conrad N. Hilton Foundation con 3.5 millones de acciones y la W. Barron Hilton Charitable Remainder Unitrust, con un total de 6 millones de acciones.

Transcurría la navidad del año 2007 cuando Barron Hilton anunció sus intenciones de dejar la mayor parte de su fortuna a la caridad, en el que incluye a la Conrad N. Hilton Foundation. A la espera de la venta de Hilton Hotels Corp. y de Harrah’s Entertainment Inc., el valor total de la contribución a la institución filantrópica se eleva a 4.5 mil millones.

La misión de la Conrad N. Hilton Foundation es “aliviar el sufrimiento” de los indigentes, enfermos mentales y niños necesitados apoyándolos de distintas formas. El Premio Humanitario Conrad N. Hilton es el más grande y generoso del mundo en su especialidad y se otorga anualmente a una organización sin fines de lucro que haya demostrado avances importantes en aliviar el sufrimiento humano.

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