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En 2001, Julissa Arce era otra joven estudiante de 18 años, cuando se le presentó la oportunidad de trabajar en el gigante de Wall Street, Goldman Sachs. Aprovechó la oportunidad y en nueve años de compromiso con su trabajo alcenzó el rango de vicepresidente, con un sueldo de 340 mil dólares al año.

Arce es hija de padres nacidos en el estado de Guerrero, México. Sus progenitores se dedicaban a vender plata en Estados Unidos, por lo que tenían visa por su negocio. Cuando ella tenía 11 años se la llevaron con visa de estudiante. Sus problemas con la visa comenzaron a los 14 años cuando quería entrar a la universidad.

En Texas se hizo una ley para que indocumentados pudieran ingresar a universidades públicas y Arce no perdió la oportunidad. Mientras estudiaba en San Antonio y luego en Austin, Texas, trabajaba en centros comerciales para cubrir todos los gastos escolares.

Arce decidió escribir un libro titulado Entre las sombras del sueño americano, en el cual relata los obstáculos y retos que tuvo que enfrentar al ser indocumentada y convertirse en la vicepresidenta de la firma Goldman Sachs, tales como inventar excusas para no hacer un viaje de trabajo a Londres porque sabía perfectamente que al abandonar Estados Unidos se sabría su estatus migratorio.

Su situación migratoria incluso afectó su vida personal. Cuando descubrió que su novio la engañaba, él la amenazó con llamar a migración para meterla en problemas.

Después de seis años en Goldman Sachs y dos en Merrill Lynch, se cansó y deseó regresar a México para ver a su familia. Terminó su experiencia en la jaula de oro. En ese momento, tenía una relación más saludable con su novio diferente, quien le propuso matrimonio y solucionó sus problemas migratorios. Esto, le permitió obtener una tarjeta verde en 2009.

Aunque ahora cuenta con la ciudadanía estadounidense, su madre no puede sacar visa durante 10 años y su hermana vive indocumentada en San Antonio con cuatro hijos nacidos en Estados Unidos.

En 2014 salió de Merrill Lynch para seguir su propio camino. Actualmente, es una autora, oradora y defensora de la justicia social basada en Los Ángeles, el centro de población inmigrante indocumentada. Ella observó el ascenso de Donald Trump. Sin embargo, en marzo del 2015, Ivanka Trump publicó un tweet que decía: “Nos encanta esta historia sobre un inmigrante indocumentado que trabajó en Wall Street”.

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