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Casi a diario, la Casa Blanca enfrenta una crisis de comunicación. El presidente Donald Trump causa polémica en Twitter con mensajes provocativos.

Amenaza a Corea del Norte o promueve el odio y la violencia con sus tuits de (ahora) 280 caracteres. Recientemente, respondió a las amenazas nucleares de Kim Jong Un diciendo que él tenía un botón nuclear más grande.

“Kim Jong-un ha dicho que el botón nuclear está en su escritorio todo el tiempo. ¿Podría alguien de su hambriento y mermado régimen decirle que yo también tengo un botón, pero que el mío es mucho más grande y más poderoso que el suyo, y que funciona?”, tuiteó el presidente de Estados Unidos.

Ante el polémico mensaje, cientos de personas protestaron para que Twitter elimine la cuenta del mandatario. Como ya lo había hecho antes, la empresa minimizó las acciones.

Sin mencionar a Donald Trump, la red social señaló en un: “Twitter está aquí para servir y ayudar a avanzar en la conversación pública global. Los líderes mundiales elegidos desempeñan un papel fundamental en esa conversación debido a su enorme impacto en nuestra sociedad”.

“Bloquear a un líder mundial desde Twitter o eliminar sus controvertidos tuits ocultaría información importante que las personas deberían poder ver y debatir. Silenciar a ese líder obstaculizaría la discusión necesaria sobre sus palabras y acciones”.

El CEO Jack Dorsey dijo hace unas semanas que los tuits de Trump son de interés periodístico y público. Asegura que revisan los tuits dentro del contexto político que los define, y hacen cumplir las reglas en consecuencia.

Sí, Dorsey habla de las mismas reglas que pretenden terminar con la violencia en Twitter. Por eso, la revista Fortune señala que podría haber otra razón por la que Twitter nunca suspenderá la cuenta @realDonaldTrump... una razón de 2 mil millones de dólares. Te contamos en nuestra galería.

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