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QUERÉTARO, Qro., mayo 7 (EL UNIVERSAL).- “¿De verdad son las que usaba?”, preguntó emocionada una niña de 11 años a su papá mientras veía en una urna el “chipote”, las antenitas de vinil y el frasco de pastillas de chiquitolina de El Chapulín Colorado, en el stand oficial del héroe mexicano.
El cofre transparente fue de lo más visitado este sábado durante la jornada de la Conque, convención de comics, que concluye este domingo. La gente no tomaba en cuenta el cofre al principio, pero al ver la réplica del disfraz del personaje, se detenían.
Si uno caminaba más por los pasillo del Centro de Congresos, sede del evento, a la vuelta de la esquina aparecía un Spiderman negro y más allá un stormtropper quitándose el casco, subiendo las escaleras eléctricas alguien que parece ser Supermán, pero sólo es una playera y, casi a la entrada, dos chicas portando una figura de Deadpool.
En las dos primeras jornadas de la Conque ya se contabilizaban cerca de 20 mil personas. Cuando comenzaron a organizar el evento, Luis Gantús y su equipo pensaban que a lo mucho se venderían 15 mil en los tres días del evento.
“Ahora no sabemos hasta dónde llegaremos”, dice feliz, en un receso que tiene, tras ir de salón en salón, supervisando que todo funcione. “En esto los organizadores nunca vemos lo que pasa”, bromea.
De la derrama económica no se anima a dar cifras, pues prefiere sentarse con Turismo de la entidad para calcular los números. Más de 80 stands conforman la Conque, con figuras que oscilan entre los 400 pesos por paquetes de Star Wars, playeras a 150 pesos con personajes de cómic e historietas nuevas con descuento de 20%.
La nueva edición de Conque quizá no tan grande como hace más de una década se realizaba en lugares como el Centro de Convenciones del Centro Médico, pero sí con figuras mundiales. Si en aquella ocasión llegaba gente como Adam West, el Batman de los 60, ahora tiene en sus filas a Stan Lee y Tom Holland, el nuevo Hombre Araña que esta noche asistirá a la Convención.
César Huerta, enviado
QUERÉTARO, Qro., mayo 6 (EL UNIVERSAL).- “¿De verdad son las que usaba?”, preguntó emocionada una niña de 11 años a su papá mientras veía en una urna el “chipote”, las antenitas de vinil y el frasco de pastillas de chiquitolina de El Chapulín Colorado, en el stand oficial del héroe mexicano.
El cofre transparente fue de lo más visitado este sábado durante la jornada de la Conque, convención de comics, que concluye este domingo. La gente no tomaba en cuenta el cofre al principio, pero al ver la réplica del disfraz del personaje, se detenían.
Si uno caminaba más por los pasillo del Centro de Congresos, sede del evento, a la vuelta de la esquina aparecía un Spiderman negro y más allá un stormtropper quitándose el casco, subiendo las escaleras eléctricas alguien que parece ser Supermán, pero sólo es una playera y, casi a la entrada, dos chicas portando una figura de Deadpool.
En las dos primeras jornadas de la Conque ya se contabilizaban cerca de 20 mil personas. Cuando comenzaron a organizar el evento, Luis Gantús y su equipo pensaban que a lo mucho se venderían 15 mil en los tres días del evento.
“Ahora no sabemos hasta dónde llegaremos”, dice feliz, en un receso que tiene, tras ir de salón en salón, supervisando que todo funcione. “En esto los organizadores nunca vemos lo que pasa”, bromea.
De la derrama económica no se anima a dar cifras, pues prefiere sentarse con Turismo de la entidad para calcular los números. Más de 80 stands conforman la Conque, con figuras que oscilan entre los 400 pesos por paquetes de Star Wars, playeras a 150 pesos con personajes de cómic e historietas nuevas con descuento de 20%.
La nueva edición de Conque quizá no tan grande como hace más de una década se realizaba en lugares como el Centro de Convenciones del Centro Médico, pero sí con figuras mundiales. Si en aquella ocasión llegaba gente como Adam West, el Batman de los 60, ahora tiene en sus filas a Stan Lee y Tom Holland, el nuevo Hombre Araña que esta noche asistirá a la Convención.
“¿Cuánto costó? (el evento), no sé, pero sí que sale más caro de lo que la gente cree, pero sale más barato de lo que genera en la gente; pero si lo recuperaremos, este es un proyecto a largo plazo”, indica.

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