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De acuerdo con los poseedores de la visa L-1B, inmigrantes altamente calificados que trabajan en Estados Unidos enfrentarán un nuevo obstáculo para renovar sus visas si desean seguir laborando en el país.


La Administración del presidente Trump anuncia cambios para aquellos que intenten renovarla en los siguientes meses.


Las compañías estadounidenses usan esta clase de visa para la transferencia de empleados en el extranjero que tienen conocimientos especializados fundamentales para la organización y con ella consiguen traerlos a sus oficinas en Estados Unidos.


Por mucho tiempo la renovación de la visa L-1B ha sido casi automática, pero eso cambiará, debido a que las nuevas reglas exigen que los poseedores de la visa deberán volver a solicitarla, como si fuera la primera vez.


El lema de Trump "Contrata Americanos, Compra Americano" se extiende hacia los asuntos de inmigración, por lo que abogados advierten que la renovación no está garantiza, si el oficial de inmigración considera que un estadounidense podría realizar el trabajo que ocupará el extranjero.


Aunque las noticias sobre aplicación de la leyes migrarorias se centran en el infame muro y la detención de inmigrantes ilegales latinoamericanos, estas van mucho más allá y comienzan a verse sus efectos globalmente, advierte, The Telegraph.

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