Tras la muerte del Papa Francisco y con la llegado del nuevo pontífice León XIV, el Vaticano retomará una de sus costumbres más antiguas y controversiales: la “misa prohibida” que habría sido restringida por Bergoglio cuando representó a la Iglesia católica hasta su fallecimiento el 21 de abril de 2025. ¿Qué es la misa prohibida y por qué el Papa Francisco no la realizaba? Conoce la razón y todos los detalles.
Desde el 8 de mayo de 2025, el Papa León XIV es el nuevo pontífice y, con su llegada al Vaticano, ha decidido retomar algunas cosas que habían sido restringidas por su antecesor, el Papa Francisco: la "misa prohibida2 es un rito que restringió Jorge Mario Bergoglio en 2021.
A través de sus canales oficiales de comunicación, las autoridades eclesiásticas anunciaron que con el Papa León XIV se volverá a ofrecer la misa tradicional en la Basílica de San Pedro.
La misa prohibida se trata de la misa tradicional, misa tridentina o también conocida como misa en latín. Este rito fue utilizado de manera oficial durante siglos por la Iglesia Católica; en el siglo XX tuvo algunas modificaciones menores.
El regreso de la "misa prohibida" ha generado toda clase de comentarios, ya que mientras algunos celebran que se recuperen este tipo de costumbres de la iglesia católica, otros más manifiestan su preocupación debido a que podría generar división dentro de la iglesia y los creyentes.
En 2021, el Papa Francisco prohibió su práctica para preservar la unidad de la Iglesia católica en torno a las reformas litúrgicas del Concilio Vaticano II; si alguien quería celebrar una misa tradicional, tenía que conseguir un permiso especial. Por otro lado, el Papa Francisco también consideró que el uso exclusivo del latín podía complicar la integración de los fieles.
La “misa prohibida”, aprobada por el Papa León XIV, se retomará el 25 de octubre de 2025 en la Basílica de San Pedro, durante la peregrinación “Ad Petri Sedem”, así lo informó el sitio oficial del evento.
“Los sacerdotes que deseen celebrar en las siguientes dos iglesias durante su estancia en Roma deben reservar su turno con antelación”, se lee en el mensaje compartido.
La “misa prohibida” será presidida por el cardenal estadounidense Raymond Leo Burke, famoso por criticar algunas de las decisiones que en su momento tomó el Papa Francisco.