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Una trabajadora del restaurante Jack-in.the-Box disparó en contra de un grupo de clientes en Texas, según se reveló en un video dado a conocer a causa de una demanda legal.
Los hechos ocurrieron en marzo de 2021, en una sucursal de la cadena de comida rápida en la ciudad de Houston. Sin embargo, la grabación de la cámara de seguridad no se había publicado.
Según los reportes, Anthony Ramos acudió al restaurante con su esposa embarazada y su hija de seis años de edad. La familia llegó a la zona de servicio al automóvil para pedir sus alimentos, luego de salir del Aeropuerto Intercontinental George Bush.
Sin embargo, al recibir su pedido, el comensal le dijo que su orden estaba incompleta y que faltaban las papas fritas.
La trabajadora, llamada Alloniea Ford, se negó a darle las papas y esto detonó que comenzaran a discutir durante varios minutos.
Durante la acalorada pelea, la empleada de Jack-in-the-Box arrojó varios sobres de condimentos hacia la ventana donde se encontraba el conductor.
Otra de las trabajadoras cerró la ventana del restaurante y Ford aprovechó para retirarse brevemente y regresar con una pistola para apuntarle al comensal. El hombre arrancó su camioneta y huyó a toda velocidad del lugar, mientras la mujer le disparaba en varias ocasiones.
Demandan a Jack-in-the-Box por trabajadora que disparó contra clientes
Luego de la agresión, la empleada de la cadena de comida rápida fue acusada de agresión agravada con arma. Pero se cambió el delito a un cargo menor tras alcanzar un acuerdo con la Fiscalía del Condado de Harris, para declararse culpable.
Alloniea Ford terminó en junio pasado su sentencia de un año, de acuerdo con reportes judiciales obtenidos por medios estadounidenses.
No obstante, la familia Ramos presentó una demanda en contra de la cadena de restaurantes Jack-in-the-Box por el ataque contra la familia.
Con la demanda en la corte civil en el condado de Harris, Anthony Ramos exige una compensación de 250 mil dólares por la agresión. Además, solicita a la empresa realizar una verificación de antecedentes de los trabajadores antes de contratarlos, para no exponer a los clientes.
Por su parte, Jack-in-the-Box quiere deslindarse del caso al afirmar que no tenía control sobre la empleada que realizó el ataque y que no es legalmente responsable de terceros.
