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El príncipe Harry y Meghan Markle están considerando comprar una mansión de lujo en California ahora que están asentando su residencia definitiva en Estados Unidos.
De acuerdo con una fuente para The Sun, la pareja está buscando la posibilidad de trasladar su nuevo domicilio cerca de las mansiones de Ben Affleck y Tom Hanks luego de que la emergencia sanitaria por Covid-19 haya terminado. A ellos se uniría su hijo Archie y la madre de Markle, Doria Regland.
“Una vez que la cuarentena y el bloqueo hayan terminado, Harry y Meghan se trasladarán a su nueva casa y quieren incluir a Doria en sus planes”, dijo la fuente,
“Sin embargo, es muy independiente y no quiere estar en su espacio. Ella tendrá su propio anexo de abuelita”, añadió.
Al parecer, los planes de incluir a la mujer de 63 años a la nueva vida de los los duques de Sussex, en California, se deben a que Meghan encuentra un apoyo en ella ahora que “no confía en muchas personas” fuera de su círculo familiar y amistoso.
La propiedad que tienen en la mira se trata de una una enorme casa de dos pisos con seis dormitorios, ubicado en el vecindario de Pacific Palisades en <span >Los Ángeles. </span>
Con un costo de $13 millones de dólares, la mansión alberga una piscina al aire libre y un área de jardín para recibir visitas, áreas verdes alrededor, un amplio estacionamiento y múltiples terrazas.
Foto: The Gosby Group
Además, cuenta con un baño completo con vistas al Océano Pacífico y otros cinco repartidos en toda la casa, un cine privado, áreas de juego, una cocina del chef y un área de barbacoa.
El actual propietario de la casa es el productor de cine Steve Chasman, mejor conocido por hacer realidad las historias de la saga Fast and Furious. Puso a la venta la mansión en septiembre del año pasado.
Según datos de TMZ, Harry y Meghan tenían en mente conseguir un hogar dentro de un presupuesto oscilante en los $12 y $18 millones de dólares cerca de la zona exclusiva de Bel-Air.
Desde que la pareja dejó a la familia real, el príncipe Charles se ha encargado de sus gastos.
Luego de que Harry renunciara a su título real, se mudó con su nueva familia a Canadá, pero decidió cambiar sus planes y dirigirse a California en marzo.
Hasta el momento los duques se han mantenido a bajo perfil y sólo se han dejado ver paseando con sus perros y distribuyendo alimentos a los más necesitados a través de la organización Project Angel Food de Estados Unidos.
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