En los últimos meses, los científicos han estudiado un misterioso objeto proveniente de un lugar lejano fuera del Sistema Solar, que parece dirigirse a nosotros en la Tierra, pero ¿de qué se trata? ¿es peligroso? A continuación te decimos lo que dicen los expertos al respecto.
El objeto al que se refieren los expertos se trata del cometa 3I/ATLAS. De acuerdo con la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio de Estados Unidos (NASA), este objeto proviene de alguna parte más allá de nuestro Sistema Solar y se dirige hacia el Sol exactamente y no a la Tierra.
El objeto fue identificado por primera vez en julio pasado por el telescopio de sondeo ATLAS (Sistema de Última Alerta de Impacto Terrestres de Asteroides) de la NASA, ubicado en Río Hurtado, Chile.
Su nombre proviene de “3” por ser el tercer objeto de este tipo detectado, la “I” por ser “interestelar” y “ATLAS” por ser identificado por el telescopio de sondeo del mismo nombre.
El telescopio Hubble recientemente capturó una imagen de este objeto interestelar, ofreciendo a los científicos una apreciación única para poder estudiar su tamaño, composición química y trayectoria dentro del Sistema Solar.
Se estima que su diámetro mide poco menos de 5.6 kilómetros y que es tan pequeño como 320 metros y que libera polvo y gas.
Los análisis hechos por Hubble mostraron un “resplandor de luz, probablemente proveniente de una coma, delante del movimiento de 3I/ATLAS hacia el Sol”. “No hay evidencia de una cola cometaria brillante en la dirección opuesta”, señaló el investigador de Harvard Avi Loeb en un blog científico.
Según dijo en un comunicado la doctora Laura Driessen, radioastronomía de la Universidad de Sydney, este objeto es raro y no se había visto uno similar con anterioridad “No sabemos exactamente de dónde vino, pero definitivamente vino de fuera del Sistema Solar”.
Hasta el momento, la NASA lo tiene catalogado como un "cometa" y no de un objeto o “nave extraterrestre”. Driessen dijo: “No hay evidencia que indique que 3I/ATLAS sea algo más que una roca espacial muy curiosa proveniente de fuera del Sistema Solar. Lo cual, siendo sinceros, es bastante genial”.
El cometa, asegura la NASA, no significa un peligro para la Tierra ya que se mantendrá alejado durante su trayectoria hacia el Sol, a una distancia de aproximadamente 270 millones de kilómetros, aunque pasaría entre la órbita de Marte y la Tierra.
Se estima que tenga su máximo acercamiento con el Sol alrededor del 30 de octubre de 2025, a una distancia de 240 millones de kilómetros.
La NASA detalla que los científicos lo analizarán hasta septiembre de 2025, las investigaciones se retomarán en diciembre de 2025 cuando el objeto haya pasado hacia el otro lado del Sol.
No se sabe qué seguiría en su trayectoria al salir del otro lado de nuestro astro; por ahora los expertos teorizan que volverá a salir del Sistema Solar.