Mientras Elon Musk y Carlos Slim comparten la visión de que sus empleados deben trabajar más días a la semana, sin descanso y a marchas forzadas, otros multimillonarios que también dominan la industria tecnológica tienen la firme creencia de que no es necesario una jornada laboral tan larga.
Bill Gates es uno de esos empresarios que creen que las personas actualmente deben tener una jornada laboral de por lo menos 3 días a la semana, dejándoles cuatro días de descanso y un horario flexible.
El fundador de Microsoft señala que trabajar tres días a la semana es una jornada ideal en la actualidad debido a que la Inteligencia Artificial (IA) y los avances tecnológicos se están haciendo cargo del trabajo pesado, lo que permite a los empleados tener más tiempo libre.
En una reciente intervención que tuvo como invitado en el programa de The Tonight Show With Jimmy Fallon, el fundador de Microsoft señaló que en al menos 10 años, los humanos sólo tendremos que trabajar entre dos o tres días a la semana, con una jornada laboral convencional de 8 horas por día sin el riesgo de perder beneficios o sufrir de reducciones de salarios.
El CEO de ZOOM, Eric Yuan, empata en opinión con Gates, señalando que la automatización de los trabajos gracias a la IA permitirá una jornada de 3 días a la semana
En una entrevista con The New York Times, Yuan señaló que la IA está haciendo mejor la vida de las personas y que en un futuro no muy lejano la implementación tecnológica recortará las semanas de trabajo a tres en lugar de cinco.
Otros líderes empresariales que creen que la jornada se recortará por la Inteligencia Artificial son Dario Amodei, director ejecutivo de Anthropic y Demis Hassabis, director de Google DeepMind.
Amodei señala que habrá un “apocalipsis laboral” para todas aquellas personas que se dedican a empleos administrativos, según cita Fortune.
Por su parte, Hassabis dice que la actual optimización de la IA está marcando el comienzo de “la era dorada de la abundancia"
Hassabis apunta que la era dorada hará que más robots, “tan inteligentes como los humanos” protagonicen una revolución tecnológica que beneficie a la humanidad: “Lo que suele ocurrir es que se crean nuevos empleos que utilizan nuevas herramientas o tecnologías y que, de hecho, son mejores”, explicó en una entrevista el ejecutivo de Google.
“Tendremos estas increíbles herramientas que potenciarán nuestra productividad y casi nos convertirán en superhumanos. Si todo eso sucede, debería ser una era de máximo florecimiento humano, donde viajaremos a las estrellas y colonizaremos la galaxia. Creo que eso comenzará a suceder en 2030”, agregó. El empresario estima que esto ocurrirá en menos de cinco años.
Mientras los multimillonarios deciden cómo deben de ser las jornadas laborales de acuerdo a los avances tecnológicos y la optimización del trabajo por parte de la IA, los empleados en todo el mundo temen por sus puestos de trabajo.
De acuerdo con un investigación del Foro Económico Mundial, los empresarios de esta generación serán los últimos en emplear plantillas de humanos en varios sectores; dentro de unos pocos años, las grandes empresas deberán involucrar el funcionamiento de “trabajadores digitales” a la par de la labor de los humanos.
En torno a esto, el Fondo estima que cerca de 92 millones de empleos desaparecerán por la automatización de la IA y su aplicación; por su parte, se crearán al menos 170 millones de nuevos empleos humanos sólo relacionados al desarrollo tecnológico.
Carlos Slim, el hombre más rico de México ha dicho que la mejor opción es que los empleados trabajen 48 horas ya que podrían ganar más dinero que si trabajaran 40 horas.
“Yo creo que es mejor que las personas trabajen 48 horas y ganen más, a que trabajen 40 horas y ganen menos. Eso es muy importante para la población: tener mejor ingreso para el mayor poder adquisitivo y es lo que se ha logrado”, opinó.
“¿Qué es mejor, ganar mucho más y vivir mejor, o trabajar menos y ganar menos? Yo creo que es mejor trabajar más y ganar más”, agregó.
El hombre más rico del mundo es un adicto al trabajo y desde sus ideales, va en contra de los deseos de Bill Gates de recortar las jornadas laborales a pesar de la implementación de la tecnología de la IA en la que él mismo trabaja a través de X, con su herramienta Grok.
Desde que se unió a la política, hasta que se retiró, Musk dijo que en el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE) de Estados Unidos, sus empleados trabajaban hasta 120 horas por semana, sin oportunidad de tener fines de semana de descanso.
Esta práctica la impulsó cuando compró X, antes Twitter. En su momento el multimillonario exigió a los empleados llevar una vida laboral “dura” y trabajar “largas horas de alta intensidad” o de lo contrario los invitaba a marcharse de la empresa.