Son pocos los que saben que el actual presidente de Estados Unidos, , estuvo “enamorado” de la y que la persiguió durante un tiempo para intentar conquistarla; expertos en la realeza y personas cercana al político han contado los intentos de Trump por ganarse el corazón de Lady Di, quien nunca cedió ni se dejó "atrapar".

Donald Trump no tiene problema de hablar de su vida privada y dar más detalles de los que se esperan; uno de los temas en los que no tiene filtro para hablar es de su interés por la fallecida princesa de Gales, madre de William y Harry y exesposa del actual rey de Reino Unido.

Durante algún tiempo, la princesa Diana fue “perseguida” por Trump, así lo reveló el biógrafo real Michael Wolf, en el podcast Inside Trump’s Head, producido por The Daily Beast. De acuerdo con el experto, el mandatario de la Unión Americana intentó conquistar a Diana durante la época de los 90.

El mismo Trump contó sus intenciones de enamorarla y convertirla en su pareja: en una entrevista de 1997 para The Howard Stern Show, afirmó que “podría haberla conquistado”, a la vez que sugirió que una relación con la princesa Diana no estaba fuera de su alcance.

En el 2000, en el mismo programa, afirmó que si se le hubiera presentado la oportunidad habría tenido una relación íntima con Lady Di. “Sin pensarlo dos veces”, dijo en su momento.

No obstante, en una charla con Piers Morgan para Good Morning Britain, Trump dijo que era falso que intentó salir con Diana, aunque admitió que sí sentía atracción por ella. “Me gustaba. La conocí una vez en Nueva York, hicimos fila para el tren y nos dimos la mano. Fue la única vez que la vi. La respetaba, pero no me interesaba en ese aspecto. Me pareció encantadora”, señaló.

Por su parte, la periodista británica Selina Scott, y amiga íntima de la princesa, reveló que Diana se sentía incómoda por la insistencia e interés del empresario estadounidense, ya que éste le enviaba enormes ramos de flores al Palacio de Kensington.

Según sus palabras, estas acciones hacían que la princesa pensara que Trump la acosaba en vez de cortejarla. La periodista narró que la entonces princesa de Gales estaba inquieta por los regalos que le hacía el magnate.

La historia sería muy distinta si se hubiera concretado el romance de Donald Trump y la princesa Diana, ya que ella no sólo hubiera sido parte de la realeza británica, sino también, habría tenido un importante lugar en la política de Estados Unidos, considerada por muchos como la nación más poderosa del mundo.

Forma parte de nuestro . ¡VIVE USA ya está disponible! Mantente informado desde tu dispositivo móvil sobre las noticias más relevantes de viajes, trabajo, vida en Estados Unidos y Canadá, celebridades, tendencias y mucho más.

Google News

TEMAS RELACIONADOS